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La aparición en películas y series de TV del “Huevo vibrador controlado con un mando a distancia”, ha hecho de éste accesorio uno de los más populares entre los juguetes eróticos.
El huevo en cuestión, que puede tener diferentes medidas, está pensado para poder introducirlo ya sea en la vagina o en el ano, dejando un lazo en el exterior del cuerpo para poder sacarlo con facilidad. Luego se puede controlar su funcionamiento desde el mando de control remoto.
Existe otra versión en la que el “huevo o bala” se introduce en un pequeño compartimento de una tanga o braga, quedando en la zona del clítoris cuando se lleva puesta.
Mención especial requiere un juguete con control remoto, que debido a su forma, una vez introducido en la vagina, permite tener coito, estimulando así durante la penetración vaginal tanto al pene, como al clítoris y al interior de la vagina.
Se pueden encontrar huevos de diferentes materiales, aunque ya os contamos que el más seguro para el cuerpo es la silicona, pero también el más caro.
Las posibilidades de vibración pueden ir desde el que tiene una sola intensidad, a los que tienen intensidad regulable, o los que ofrecen diferentes funciones de vibración a ritmos (variable), y de rotación.
En cuanto al mando para controlarlo, pueden tener una pantalla que permite saber en qué posición de vibración se encuentra el huevo.
La mayor atracción de este juguete, es la posibilidad que tiene de usarlo en lugares públicos, o en situaciones cotidianas, estando con la ropa puesta y sin que nadie más sepa lo que está pasando, excepto en su caso, la persona a la que se le entrega el control del mando. Aunque coincidir sea altamente improbable, hay que tener en cuenta los posibles cruces de frecuencias, en el caso de estar dos huevos funcionando en el mismo radio de frecuencia.
Este juguete, también es un minivibrador que con su forma redondeada puede ser aplicado en cualquier zona erógena del cuerpo y puede servir para la estimulación tanto en los juegos masturbatorios como en los compartidos.
Por último, apuntar que los que funcionan con pilas tienen la pega de que usan pilas especiales, son caras y se agotan con facilidad. Pero los hay también con batería recargable a la red eléctrica.
El uso de accesorios puede aportar nuevas sensaciones a tu vida erótica, infórmate y atrévete a probar «ese juguete» que ha llamado tu atención.
Fernando Alonso
Experto Universitario en Sexualidad Humana.
Máster en Promoción de la salud sexual.
Miembro de la AES www.aes-sexologia.com
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